El CPAP (del inglés Continuous Positive Airway Pressure) significa presión positiva continua en la vía respiratoria. Es un aparato compuesto por una máscara que está conectada a través de un tubo corrugado a un pequeño compresor de aire.
De acuerdo al modelo, la máscara debe colocarse sobre la nariz o sobre la nariz y la boca al momento de ir a dormir, y el dispositivo debe permanecer al lado de la cama. El CPAP genera un flujo de aire para evitar el ronquido y la apnea obstructiva del sueño. De esta forma, las vías respiratorias permanecen abiertas durante todo el período del sueño y se evitan los episodios de apnea. Además, este aparato mejora la calidad del sueño, ya que reduce el cansancio y la somnolencia diurna y, de esta forma, mejora la calidad de vida del individuo.
La importancia de dormir bien y el rol del CPAP
Una buena noche de sueño es esencial para el funcionamiento de nuestro organismo. Dormir bien ayuda a nuestro cuerpo a descansar y tener la energía suficiente para llevar a cabo las tareas diarias con un excelente desempeño físico y mental. El dormir el tiempo suficiente para una buena recuperación del cuerpo es igual de importante que la calidad del sueño.
Antes de comenzar un tratamiento con CPAP, se debe llevar a cabo un estudio del sueño para poder indicar el mejor tratamiento para el caso específico del paciente. Para obtener un diagnóstico de apnea del sueño, el paciente debe buscar a un especialista en sueño, quien le recomendará realizar un examen del sueño. De esta forma, el paciente se asegura de obtener el tratamiento más adecuado para su caso.
El diagnóstico de la apnea obstructiva del sueño es simple y necesario. El Examen del Sueño Biologix es una polisomnografía tipo IV que puede realizarse en casa por medio de un celular y un sensor compacto e inalámbrico. De esta forma, el examen se realiza sin alterar la rutina del sueño del paciente. A la hora de dormir, el paciente solo debe colocarse el sensor en el dedo e iniciar el examen en la aplicación de Biologix. Al despertar la mañana siguiente, con pulsar en “Concluir examen”, el paciente recibirá su resultado en cuestión de segundos.
El CPAP es el tratamiento recomendado como estándar de oro para pacientes con apnea del sueño moderada o grave, es decir, que presenten más de 15 apneas/hipopneas por hora. Se debe realizar un análisis completo del paciente a fin de entender y abordar las mejores posibilidades de adaptación. Incluso los pacientes con índices más bajos de apnea, cuando son muy sintomáticos y tienen una reducción significativa de la calidad de vida, pueden adaptarse fácilmente a este tratamiento.
Además de tratar la apnea y el ronquido, el CPAP puede emplearse para tratar otras enfermedades como la neumonía, insuficiencia respiratoria o insuficiencia cardíaca. Todo dependerá del modelo del equipo y la configuración que se utilice. Inclusive el CPAP puede utilizarse luego de cirugías cardíacas, abdominales y/o torácicas.
El médico es el profesional responsable de prescribir el tratamiento. Sin embargo, para los casos de CPAP, los kinesiólogos son los más indicados para aplicarlo, adaptar al paciente y monitorearlo durante todo el tratamiento mediante el análisis de datos y verificación de la eficacia del mismo.
Existen varios beneficios en lo que se refiere a este tratamiento, entre ellos, el aumento de la capacidad respiratoria y motora del paciente. Otras ventajas incluyen el aumento de la absorción del oxígeno (O₂), la eliminación del dióxido de carbono (CO₂), la disminución n del cansancio y la falta de aire, y el aumento de la capacidad física y respiratoria, entre otras.
¡IMPORTANTE! Solo los médicos y odontólogos debidamente calificados pueden diagnosticar enfermedades, indicar tratamientos y recetar medicamentos. La información disponible en este blog es solo de carácter educativo..